1. Explica a qué nivel de la lengua pertenece este fragmento. Recuerda construir un texto y justificar lo que digas con ejemplos del fragmento.
Pos aunque no tenía encasi niun rial desos cachocartones pal viaje ni na, me subí al camioneta. Aluego questaba drento del carromato queicen en la capital autobús, tuavía pude ir sentao ytó aunque to repretao, medio ringao y to tieso. Pos tuve de pagar y con pacencia me pongoservar al personal cabía alredor...
2. Explica los elementos de la comunicación en este texto. Explica también los elementos de la comunicación no verbal que encuentres. Además, señala si hay indicios o símbolos que no sean las palabras. Recuerda construir un texto para responder a estas cuestiones.
—Dicen que es el fin del mundo —se lamentó un día Arnau al entrar en su casa—. Barcelona entera ha enloquecido. Los flagelantes, se hacen llamar. —María estaba de espaldas a él. Arnau se sentó a la espera de que su mujer lo descalzase y continuó hablando—:Van por las calles a cientos, con el torso descubierto, gritan que se acerca el día del juicio final, confiesan sus pecados a los cuatro vientos y se flagelan la espalda con látigos. Algunos la tienen en carne viva y continúan...—
Buscó la barbilla de su mujer con la mano. No podía ser. Ella no.
María levantó unos ojos vidriosos hacia él. Sudaba y tenía el rostro congestionado. Arnau intentó levantarle más la cabeza para verle el cuello, pero ella hizo un gesto de dolor.
—¡Tú no! —exclamó Arnau.
María, arrodillada, con las manos en las esparteñas de su esposo, miró fijamente a Arnau mientras las lágrimas empezaban a caer por sus mejillas.
—Dios, tú no. ¡Dios! —Arnau se arrodilló junto a ella.
—Vete, Arnau —balbuceó María —. No te quedes junto a mí.
Arnau intentó abrazarla, pero al cogerla por los hombros, María volvió a hacer una mueca de dolor.
—Ven —le dijo alzándola lo más suavemente que pudo. María, sollozando, volvió a insistir en que se fuera—. ¿Cómo voy a dejarte? Eres todo lo que tengo... ¡lo único que tengo! ¿Qué haría yo sin ti? Algunos se curan, María. Tú te curarás. Tú te curarás. —Intentando consolarla la llevó hasta la alcoba y la tumbó sobre la cama. Allí pudo ver su cuello, un cuello que recordó precioso y que ahora empezaba a ennegrecer—. ¡Un médico! —gritó abriendo la ventana y asomándose al balcón. Nadie pareció oírle. Sin embargo, aquella misma noche, cuando las bubas empezaban a adueñarse del cuello de María, alguien marcó su puerta con una cruz de cal.
Ildefonso Falcones, La catedral del Mar
3. Explica en el texto anterior las funciones del lenguaje. Recuerda explicarlas teniendo en cuenta sus marcas lingüísticas. Pon los ejemplos indicando la línea en la que se encuentran (para ello numera las líneas del texto)